Actuar bien en diferentes roles en una obra escénica, significa ser buen actor,
desempeñar bien la tarea laboral, lograr el objetivo de transmitir la esencia del
personaje epresentado.-
Si los análisis o investigaciones psicológicas definen como ROLES a las situaciones de relación con nuestras personas cercanas, significa que estamos representando personajes preestablecidos por alguien y que lo hacemos en forma amateur, no profesional.-
Según los estudios sobre la niñez, Piaget e Inhelder encontraron que el niño es “obligado a adaptarse incesantemente a un mundo de mayores, cuyos intereses y reglas siguen siéndole exteriores”.
Si somos obligados a cumplir reglas que no nos gustan, nunca lo haremos bien. De ahí, que seamos malos actores toda la vida. (conflictuados y traumados). No puede haber una orientación social común porque los objetivos son ajenos a las personas.-
Aparentemente, cumplir con los roles de hijos, hermanos, nietos o padres tiene la finalidad de mantener la estructura familiar. Nos han enseñado que nuestra seguridad está allí y como no conocemos otra alternativa quedamos atrapados allí y sometidos a representar esos roles para no quedar marginados.-
Si para mantener relaciones sociales (familiares) es necesario representar roles adecuados ante los demás, significa que NO estamos viviendo cada uno su vida sino llevando adelante un argumento con una meta propia, que NO concuerda con la finalidad de nuestra vida.-
Enrique Pichón Riviere investigó buscando un origen común para todas las enfermedades (de su ambiente psiquiátrico) y llegó a que la “enfermedad única” era causada por la “estructura social alienante” el conjunto de reglas sociales que todos aprendemos de niños.-
En su libro El proceso Grupal dice “El psiquiatra asume el rol de condicionante de la evolución del paciente y entra en el juego del grupo familiar que intenta segregar al enfermo, por ser el portavoz de la ansiedad grupal. En síntesis, el psiquiatra se transforma en el líder de la resistencia al cambio a nivel comunitario y trata al paciente como un sujeto “equivocado”, desde el punto de vista racional.”
Esta investigación pone en claro, 1º. Que las reglas que nos obligan a seguir son contrarias a la naturaleza humana (antisociales), 2º. Que, por consiguiente, lo que consideramos racional, no lo es tanto si produce enfermos, 3º, que en un ambiente fijo como el familiar, su continuidad altera a sus integrantes y con el tiempo alguno resulta enfermo (algo loco) exteriorizando los conflictos del grupo, 4º, que la “formación” del psiquiatra es parte del problema ya que asume un rol en vez de promover un cambio.-
La autoestima, las relaciones humanas, la inteligencia emocional son principios de cambios de esa situación falsa que vivimos. La autoestima tiene por finalidad el reconocernos y valorarnos como personas y SER en vez de ACTUAR, dejar de representar papeles para quedar bien con los demás y acercarnos a una práctica de vida con beneficio y satisfacción para uno mismo.-
Las relaciones son una necesidad, ante una realidad individualista que desplaza toda posibilidad afectiva. La autoestima es el principio personal para concretar buenas relaciones humanas en base a las pequeñas verdades que es uno. Esto favorece la confianza y mejora los afectos, lo que hace que la inteligencia emocional, como represora consciente de la ira, tenga poca aplicación.-
Los roles que se establecen para cada relación personal dan una imagen de nosotros que, aunque no es la real, trata de ser la que marcan las reglas. Cuando no representamos el rol con la imagen correcta entramos en conflicto con las personas del ambiente. Ya vimos que somos todos actores de entre casa, por lo tanto sufrimos fallos. Un fallo actoral puede arruinar una obra pero en este caso estamos hablando de nuestras relaciones y es bueno recordar que, a través de asumir roles falseamos nuestra vida. Cualquier relación que uno tenga con los demás, en esas condiciones, es demasiado frágil para poder ser profunda y duradera. Si solo somos imagen, no somos nosotros, por lo tanto la relación que se produce es de imágenes y no de personas.-
La autoestima nos pone en la realidad, aunque seamos menos que en nuestra imagen… pero nos da la oportunidad de generar una buena amistad, con otra persona real. Las relaciones humanas son una necesidad presente pero requieren de un proceso social para que sean practicadas en condiciones de autoestima e integración social responsable (autogestión) y participativa.-
Por Luis Alberto Alvarez.
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