LA MÁS GRANDE SOCIEDAD SECRETA


Al igual que tantas otras cosas muy visibles, la peculiar pirámide truncada y coronada por el ojo radiante, así como las leyendas latinas que la rodean, hace del dólar la moneda más emblemática de los últimos siglos, que en una cara nos muestra el retrato de George Washington, que da nombre a la capital del nuevo cesarismo mundial. Detrás, como agazapado al dorso del billete, éste curioso y poco conocido símbolo se empareja discretamente con el águila imperial del escudo de los EE.UU., coloquialmente conocido como “el pavo”. Muy pocos saben qué es lo que muestra y oculta a la vez.
Retrocedamos hasta el 1º de Mayo de 1776. En esta fecha del siglo XVIII, el jesuita judeo-alemán Adam Weshaupt funda la cúpula de la logia masónica definida como luciferina, de los “Iluminados”, con el objetivo expreso de abolir el cristianismo y
establecer “el nuevo Orden Mundial” a través de la anarquía y siguiendo el largo y paciente camino que inician quienes son capaces de diseñar proyectos para la Historia, conscientes de que su propio tiempo es secundario, puesto que se requieren generaciones
para alcanzar la meta. Sus planes adquirirían viabilidad haciéndose con el poder absoluto de la Masonería mundial. Para los “Iluminados” los objetivos del Nuevo Orden Mundial se pueden resumir en la unidad absoluta a la que tiende la globalización.
El símbolo que adorna el dorso del billete de un dólar, es, precisamente, el sello de la Orden de los Iluminados.
En el emblema se observa nítidamente el año 1776 grabado con números romanos en la base de la pirámide, como conmemoración de la fecha fundacional de la orden masónica a la que identifica. La filiación satánica se subraya por el hecho de que la
fundación tuvo lugar al día siguiente de la noche de Walpurgis.
La incredulidad o el asombro que se puede sentir ante la innegable presencia del sello de los Iluminados en el billete norteamericano, sólo se justifica en quienes no sepan que George Washington fue un miembro relevante de esta Orden, como también lo fueron Benjamín Franklin, John Adams, Thomas Jefferson, Roosevelt, y, según se afirma en fuentes consultadas, Ronald Reagan y los dos George Bush, padre e hijo, entre otros representativos nombre de la Historia de los EE.UU. No menos significativa es la vinculación con los Iluminados que se atribuye a familias poderosas como los Rockefeller y, con mayor importancia, los Rothschild. Ascendiendo en el orden del poder efectivo, se sitúa a los Bilderberger o Grupo Bilderberg, un club de elite formado en mayo de 1954 e integrado por 500 hombres de las organizaciones más ricas, poderosas e influyentes del mundo, que comparten el objetivo de instaurar el “Nuevo Orden Mundial”, cuyo lema se inscribe expresa y claramente en el sello de los Iluminados (Novus Ordo Seclorum -Nuevo Orden Secular).

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